La isla de la Muerte

La isla de la Muerte

La isla de San Michele, también conocida como la isla de la muerte, ha sido el cementerio de Venecia desde principios del siglo XIX.

San Michele está dedicada enteramente a aquellos que ya partieron, siendo ocupada en su totalidad por iglesias y por largas filas de tumbas. Parece ser uno de los cementerios donde presumir de tumba se convierte en arte, ya que el espacio es tan mínimo que vale oro. Desde los nichos estrechos y hormigonados de la nueva extensión, hasta los grandes mausoleos de las más ricas familias venecianas, pasando por los cenotafios de princesas y bailarinas rusas, hasta la misma arquitectura nos demuestra que incluso después de la muerte hay diferencias.

El origen de este cementerio se remonta a 1807 cuando la isla de San Cristoforo comenzó a ser utilizada como cementerio por razones higiénicas, anteriormente los muertos ocupaban las escasas porciones de terreno libre que los vivos dejaban en la ciudad de Venecia. Habitualmente eran sepultados en el interior de las iglesias y en los llamados sacrati hasta agotar el espacio disponible. Un edicto napoleónico impuso a los venecianos renunciar a esta tradición, ya que el agua no permitía excavar fosas profundas y en los periodos de acqua alta era probable que  muchos pozos se contaminaran a causa del agua que había entrado en contacto con los cadáveres. Con la llegada de las tropas de Napoleón en el siglo XIX, los franceses rellenaron el canal que separaba San Michele y San Cristóforo para unir ambas islas y permitir así la ampliación del pequeño cementerio. Con ello crearon una isla cementerio que parece flotar sobre las aguas de la laguna, aislada y accesible sólo por barco.

San Michele tiene una forma cuadrangular, el recinto está fortificado con unos muros de terracota y con numerosos cipreses. El edificio mas destacado es el de la iglesia de San Miguel, levantado en el siglo X por las familias Lively y Bertsolana. En 1469 Mauro Codussi inicio las obras de reconstruccion de estilo renacentista, considerada la primera de Venecia de este estilo.

Al pasear por el recinto se observa que las tumbas estan muy juntas, ya que el espacio en la isla es limitado y se aprovecha al máximo. Al cabo de uno saños los cuerpos son depositados en osarios para poder enterrar a muertos más recientes.

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